domingo, 30 de octubre de 2011

¿Qué he aprendido en la carrera y como ponerlo en marcha?









Este sábado acudí como fan de un equipo a otra localidad. Nos desplazamos 4 más un par de padres.  Al equipo al que animabamos había tenido una semana dura dentro del vestuario, con muchos problemas y estaban tocadas moralmente ya antes de empezar el partido.

El partido comenzo con nuestro equipo perdiendo pero manteniéndose en el partido hasta llegar en el 3º cuarto a ponerse por delante ( era un partido de baloncesto) .

Entrando el último cuarto nosotros los fans "iracundos" empezamos a animar a nuestra defensa gritando "VA VA VA VA VA..." hasta que tenemos que respirar.

Llega los últimos segundos del partido con nuestro equipo un punto por encima y posesión, pero roban el balón el equipo rival, falla, coge el rebote y anotan sobre la bocina...

Tras estos momentos con final fallido de disney, los deportistas solemos decir que se nos queda cara de tontos, y también a los aficionados. Pero más se nos quedo cuando los aficionados locales nos insultaron diciendo que nos volvieramos a nuestra localidad "TONTOS DEL VA VA VA", todo esto con hijos y nietos delante.

En ese momento en acto que no defiendo y que seria dificil de justificar (perder y encima que te insulten sin sentido) uno de mis compañeros de animar lanza una lata de aquarius a la afición rival (al que nos increpaba) con mala suerte de que casi le da a una niña pequeña.

Yo aumentando la mala suerte me dirigía hacia los aficionados para pedir explicaciones de por qué tenían que insultarnos cuando en ningún momento nos habíamos metido con su equipo, que solo anímabamos al nuestro. Pero tras ese acto yo no podria otra cosa que vigilar que no me agredieran fisciamente porque además pensaban que fuí yo el que la lanzo.

Al final se calmaron las cosas, pero toda la gente con la que he hablado de esta historia se quedan extrañados con la idea de que yo fuera a hablar para razonar que no deberían de insultar a los fans de otros equipos que solo animan a su equipo y además con niños delante. Igual lo de lanzar objetos que son actos puros de pensar demasiado en caliente (si es que se piensa)

Y todo esto es por todo lo que he aprendido estos 5 años de carrera sobre los valores del deporte.

martes, 18 de octubre de 2011

En busca de Bobby Fisher

Vuelvo con ganas al blog que lo había dejado un poco abandonado, para ello comento una película que vi este verano pero que la vi quizás hace más de 10 años.

Hay que ver como cambia la perspectiva con el tiempo el ver la película como un niño y luego como un poco más hombre.

Esta película cumple mucho las expectativas de "peli disney" y de ajedrecistas. Pero creo que va un poco más allá.

Josh Waitzkin es el típico niño que descubre que tiene un gran talento en el ajedrez (ajedrez pero aquí se puede poner cualquier deporte o habilidad en la vida) y sus padres se vuelcan con él, consiguiendo el mejor entrenador y que además se divierta jugando en la calle ( aquí en España no se tiene esa cultura de jugar al ajedrez en la calle , pero por ejemplo en New York hay sitios famosos donde acuden jugadores como quien va a leer el periódico).

Llegan las victorias y con ellas la ilusión del padre que le crea más presión al niño, además su entrenador emplea métodos más duros.

El niño acaba pensando que si gana hace triste a otros niños y duda de que él sea bueno (tiene miedo porque aparece otro niño que entrena más que él y con mejores entrenadores).

El padre llega a la conclusión de que no debe de presionarle, que debe de dejarle que el sea feliz, entonces vuelve para intentar derrotar a su antítesis en la última partida (para darle mayor dramatismo claro)
Aquí el final de la película, donde se muestra que ha aprendido la lección, hacer caso al maestro de la calle, al del club y a si mismo ofreciendo tablas al rival a sabiendas de que si continuaba la partida iba a ganar.


¿Qué saque con esta película? pues que para empezar, no todos pueden ser el nuevo "mejor jugador de ese deporte o disciplina" solo llega uno si es que llega, por lo que no hay que crear grandes expectativas aunque aparezca un rayo de luz.

Por parte de los padres ante sus hijos/as prodigio deben darles todo su apoyo, pero no olvidando en formarle educacionalmente. En tener un plan b por si cambia de afición, por si ya no le gusta o por si le pasa una desgracia (los deportistas jóvenes que dejan los estudios y luego se lesionan impidiéndoles la practica de su deporte)

PD: Esta basado en hechos reales
                                                Aquí Jhon (el protagonista real con su padre)


PD2: Geniales interpretando Joe Mantegna y Joan Allen como padres, a Ben Kingsley como entreandor, Laurence Fishburne como jugador de la calle y Max Pomeranc como el niño protagonista.
Agradecer también la entrada del blog de Richard Guerrero